Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Historia y Conquistas en España
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Desde las primeras sufragistas del Siglo XIX hasta nuestros días la lucha y la progresión de la sociedad por la equiparación de las mujeres en Derechos ha recorrido un largo camino. La historia del Día Internacional de la Mujer Trabajadora y de los Derechos alcanzados en España son unos datos a poner en valor en esta fecha tan señalada.
De dónde viene el Día de la Mujer Trabajadora
El 3 de mayo de 1908, promovido por mujeres del Partido Socialista de EEUU, se celebró por primera vez un Día de la Mujer en el Teatro Garrick de Chicago. Al año siguiente, el 14 de febrero 1909, se celebró por primera vez en Nueva York un Día Nacional de la Mujer en el que se reivindicaba una mejora en las condiciones laborales de las trabajadoras de la industria textil, cuyas condiciones laborales resultaban infames. En esta protesta se calcula que 15.000 mujeres marcharon a Nueva York exigiendo mejoras laborales en su jornada laboral, salarios y para reivindicar su derecho de voto.
En noviembre de ese mismo año tuvo lugar, también en Nueva York, la huelga de camiseras también llamado el levantamiento de las 20.000. En el año 1910 se celebra en Copenhague la II Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas que proclama el 8 de marzo como Día Internacional de la Mujer además de reiterar exigencias como el derecho de voto. Al año siguiente, el 19 de marzo de 1911, se celebró por primera vez el Día Internacional de la Mujer en Dinamarca, Suiza, Alemania y Austria con asistencia multitudinaria.
Poco después, el incendio de la fábrica Triangle Shirtwaist de Nueva York, en el que murieron 140 trabajadoras, provocó importantes cambios legislativos en la normativa laboral americana. Todos estos sucesos hicieron que la reivindicación de los derechos de la mujer se convierta en una cita especial en el calendario anual.
¿Qué derechos ha conquistado la mujer en España?
La legislación y la conciencia social en España ha dado un cambio sustancial en el último siglo en lo relativo a los derechos de la mujer. Afortunadamente, en estos años se ha logrado muchos avances que en este Día Internacional de la Mujer Trabajadora se consolidan, sin dejar de reivindicar otros nuevos.
Acceso a estudios universitarios. En principio no existía ninguna normativa que permitiera o no la participación de mujeres en estudios superiores porque, sencillamente, nadie se planteó esta posibilidad. En 1785 María Isidra de Guzmán, la doctora de Alcalá, fue la primera mujer en obtener el grado de doctora. Se dice que en 1849 Concepción Arenal se disfrazó de varón para estudiar Derecho en Madrid. En 1882 se prohibió, por Real Orden, la participación de mujeres en la Universidad, pero esta prohibición se levanta en 1888, permitiendo la matriculación de mujeres aunque con muchas restricciones. Finalmente es el 8 de marzo de 1910 cuando se permite en España el acceso a la Universidad de las mujeres en igualdad de condiciones que los hombres.
Derecho de voto. El Derecho de voto para la mujer se reconoce por primera vez en España, sólo para mujeres que sean cabezas de familia, durante la dictadura de Primo de Rivera limitado a las elecciones municipales. Durante este periodo, hubo una primera participación de mujeres en órganos de gobierno y consultas plebiscitarias.
La Constitución de 1931 reconoció, por primera vez, el derecho de las mujeres a ser elegidas. Aunque las elecciones constituyentes de dicho año se celebraron por sufragio exclusivamente masculino.
Durante los debates constituyentes de este año se produjo la controversia sobre si procedía o no el voto femenino. A la cabeza de su defensa estaba la diputada Clara Campoamor. Finalmente, triunfaron las tesis favorables al derecho de voto de la mujer y el artículo 31 de la Constitución de 1931 reconoció el voto femenino sin restricciones.
Igualdad jurídica. Además del voto existen otros muchos aspectos en los que la igualdad de la mujer no ha sido completa hasta hace relativamente poco tiempo, hasta finales de los años 70 la desigualdad de la mujer frente al hombre era algo generalizado.
- Hasta los 25 años las hijas seguían bajo la tutela de su padre, salvo que se casaran o se metieran a monjas.
- La mujer casada no podía firmar contratos sin el consentimiento expreso de su marido.
- El antiguo artículo 57 del Código Civil decía “El marido debe proteger a su mujer y ésta obedecer al marido”
- El marido podía fijar el domicilio y la mujer estaba obligada a seguirle y adquirir, en su caso, su nacionalidad.
- Artículo 105 del Código Civil, la infidelidad femenina era, por si sola, causa de separación, pero la masculina no.
- La patria potestad sobre los hijos era ejercida por el padre.
- La esposa debía se autorizada por su marido para cosas como aceptar una herencia, ejercer el comercio, trabajar, abrir una cuenta corriente en un banco, sacar el carnet de conducir o el pasaporte.
- En un matrimonio, el marido era el administrador único de los bienes gananciales.
Día Internacional de la Mujer Trabajadora
Todo esto fue cambiando poco a poco, comenzando de manera tímida durante la dictadura franquista y con reformas mucho más radicales desde la democracia y la Constitución de 1978. Nuestra actual Constitución, en su artículo 14, proclama la no discriminación de los individuos por razón de sexo.
En la actualidad no existe en nuestra legislación ninguna diferencia por razón de sexo entre hombre y mujeres y se trabaja para promover actuaciones que eliminen las que aún existen. Hoy las reivindicaciones son de otro tipo. En este Día de la Mujer Trabajadora se quiere dar visibilidad a la lucha contra a violencia machista y reivindicar la igualdad laboral y salarial.
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